10 de Junio de 1971...

Exactamente el 10 de junio de 1971.

Eran las tres de la tarde...

En el casco de santo Tomas, en el Instituto Politécnico Nacional, estudiantes universitarios y politécnicos comenzaron a reunirse.
Dos horas después, a la cinco de la tarde, iniciaron la marcha.
Los manifestantes portaban pancartas y gritaban consignas contra el entonces presidente Luis Echeverría Álvarez.
Alzaban la voz para oponerse a lo que llamaban la reforma educativa burguesa.
Exigían también democratizar la vida sindical y libertad para los presos políticos.
Los estudiantes tomaron por la avenida de los maestros, seguidos siempre por la atenta mirada de policías y granaderos.
Pero al dar vuelta hacia la calzada México-Tacuba, se escuchó un estallido y disparos de arma de fuego.
De pronto los estudiantes se vieron copados por un grupo de personas que portaban varas y pistolas.



Al cruce de la calzada México-Tacuba y avenida Instituto Técnico elementos de la policía preventiva del Distrito Federal lanzaron gases lacrimógenos contra los manifestantes y sus agresores.
En la confusión varios estudiantes cayeron, otros más fueron detenidos y subidos a camiones y patrullas.
El ulular de la sirenas de las ambulancias de la Cruz verde y la cruz roja tornó más dramática la situación.
Nunca se supo la cifra real de muertos y heridos.
Los agresores fueron identificados como integrantes de un grupo paramilitar creado en el sexenio del presidente Gustavo Díaz Ordaz y conocido como los de halcones.
Desde entonces familiares y amigos de los caídos y desaparecidos marchan por calles de la Ciudad de México.
Sostienen sus fotografías exigiendo castigo para los responsables y les recuerdan a las autoridades, que sólo el olvido mata.

En julio del 2004, creyendo en las promesas de Vicente Fox durante su campaña con respecto de aclarar y hacer justicia en crímenes del pasado, se presentó una demanda por genocidio por los hechos del 10 de junio de 1971, la cual fue descartada por “prescripción”.

A pesar de la mala reputación del gobierno de Vicente Fox sobre el esclarecimiento del 10 de junio, sorpresivamente, a unas horas de llevarse a cabo las pasadas elecciones presidenciales, se libera orden de aprehensión contra Echeverría pero se le dejó libre a las pocas horas de su detención por prescripción del delito. Meses después, a horas de la toma de posesión de Felipe Calderón, se vuelve a liberar una orden de aprehensión en contra de Echeverría, la cual vuelve a burlar Luís Echeverría.

Actualmente no parece haber signos de que se haga justicia a corto plazo sobre este tema.